Archive for ‘Un nuevo tiempo’

August 13, 2007

Mucho, mucho que explicar

Que el mundo fue y será una porquería ya lo sé. ¡En el quinientos seis y en el dos mil también!. Que siempre ha habido chorros, maquiavelos y estafaos, contentos y amargaos, valores y dublé…  Pero que el siglo veinte es un despliegue de maldá insolente,  ya no hay quien lo niegue.  Vivimos revolcaos  en un merengue y en un mismo lodo  todos manoseaos… ¡Qué falta de respeto, qué atropello a la razón!  ¡Cualquiera es un señor!  ¡Cualquiera es un ladrón!

Cambalache – Enrique Santos Discépolo

 

El gobierno argentino debe muchas explicaciones a sus ciudadanos. Y los argentinos se las están exigiendo. La ristra de posibles delitos en relación a la “maletica” contentiva de casi 800.000 dólares es más larga que el repertorio de tangos de Santos Discépolo.

Pero el gobierno del Sr. Hugo Chávez y del Sr. Rafael Ramírez debe montañas de explicaciones a los venezolanos. No basta esta calistenia barata de excusas que ni mojan ni empapan y que el pueblo simplemente no se traga. No basta que desde Miraflores y desde Pdvsa lancen comunicados que no son más que palabrería vana y justificaciones sin fundamento. Y no alcanza que tengan el tupé de calificar este asunto de “policial” o de “malentendido”. Y menos que pretendan convencer a los venezolanos que esto es una trampa montada por las cúpulas podridas del imperialismo con el único fin y propósito de desprestigiar al gobierno de Chávez.

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August 8, 2007

Indulgencia con escapulario ajeno

Editorial Un Nuevo Tiempo

7 de agosto de 2007

http://www.unnuevotiempo.org.ve/cms/content/view/694/29/

Don Regalón salió de viaje, otra vez. Aquí, en tierras de Bolívar, deja el reguero, un reguero que le resulta de poca importancia. Poco importan los 17 fallecidos y los 657 damnificados por las lluvias, que se suman a los cientos de miles de familias que llevan años implorando por un techo sólido.

Don Regalón salió de viaje, otra vez. Algunos tienen la tentación de recitar “me gusta cuando viajas, porque estás como ausente”. Un nuevo viaje, costoso, en el que se dilapidarán los recursos que tanto necesitan los venezolanos para poder abandonar la pesadilla de su vida y lograr el derecho a armar un presente decente y digno y un futuro mejor y promisorio.

La prensa argentina resalta que el gobierno de su país ve con buenos ojos la nueva visita del Presidente Chávez, que la siente como un gesto de apoyo financiero. Traducción: en Argentina le agradecen a Chávez que les dé los dineros que no le pertenecen, pero que él administra como si lo fueran. Eso, aquí y allá, se llama ganar indulgencia con escapulario ajeno. Porque ajeno es el escapulario, un escapulario que le pertenece a los venezolanos, a quienes jamás se les ha preguntado sobre el particular ni jamás se les ha pedido autorización o permiso para andar por el mundo obsequiando a manos llenas el dinero que urge para sacar al pueblo venezolano del mar de calamidades en el que naufraga.

Don Regalón hace turismo. Un turismo muy particular; pasea por el mundo entero exhibiendo su carácter frívolo, extravagante y de derroche. Entre tanto, el pueblo espera que algún día para el Presidente Chávez Venezuela y los venezolanos, su bienestar, su progreso, sus dolores, sus angustias, sus pesares, sean la primera prioridad.

El viaje incluye escalas en Bolivia y Ecuador, paradas pertinentes para también abrir el grifo y dejar caer otros cuantos millones.

En Vargas, el despegue y aterrizaje del avión presidencial se ha convertido en una diversión. “¡El avión, el avión, ahí va el avión…!” Allá dicen que “de vez en cuando el Presidente Chávez visita a Venezuela”. Y se preguntan por qué si en todos los lugares que visita es tan generoso en los regalos, cuándo será que se acuerde de los venezolanos a los que de vez en cuando se honra en visitar.